Como cualquier fin de semana quisimos ir a pasear en familia. Pensabamos que el centro ya estaba adornado de navidad como el mall cerca de nuestra casa, pero no, todabia falta un poco. Pero igual estaba muy lindo, claro que ya oscureciendo y con una lluvia fina. Aqui el clima no inmuta a nadie y los papas siguen pasiendo a sus hijos sin dudarlo. Por primera vez sentimos las campanas que ocupa el nochero del parque cuando va a cerrarlo y quiere que los volados caminantes salgan de ahi. No nos acordamos que al cambiar la hora los parque cierran mas temprano. Aqui algunas fotos. Eran las cinco de la tarde.
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