El lento calvario para llegar a destino

Comienzo a contar nuestras peripecias para llegar a Chile:

1. Son las 3 de la tarde y ya no hay vuelta atrás, se comienza a colocar el equipaje frente al ascensor esperando al taxi. Van cinco maletas mas el coche doble y el asiente del auto del Rai, esperando que al llegar a Chile nos espere la camioneta que arrendamos con asiento de auto de Carlitos.
2. Nos demoramos casi una hora al aeropuerto. Íbamos con tiempo, Carlos coloco todo el equipaje en un carro, se caían las maletas para todos lados, a mi me vino un ataque de risa nerviosa y me mandaron a la punta del cerro. El Dugui quería ir en brazos del papa, así que el camino hacia el counter fue mas lento que tortuga. Como Carlos viaja tanto tuvimos la posibilidad de hacer el check in en la fila mas rápida, pero la chica con nosotros se demoro como si fueras veinte personas, así que los que estaban detrás no daban mas de enrabiados.
3. El viaje a Madrid fue mas o menos no mas, los niños molestaron mas que lo normal les diré, ya estábamos agotados, pero no importaba solo teníamos dos horas en el aeropuerto de Barajas para embarcar a Chile, el vuelo salia a las 11.30 de la noche. Pisando tierra española, supimos que el vuelo de Iberia estaba atrasado, salia a las 3.30 de la mañana!!! por favor, imaginense nuestro espanto, yo quería llorar, lidiar con dos monstruos chicos todo ese rato.
4. Por suerte pudimos esperar en el business launch de Iberia. Excelente atención, comimos algo y los niños jugaron, había hasta una sala con camas para descansar, así que ahí nos echamos y los niños se quedaron dormidos. Yo me imaginaba como estaban los pasajeros afuera, sin asientos cómodos y dando vueltas cansados.
5. Ya arriba del avión fue espantoso. Mis hijos se despertaron en nuestros brazos, no entendían nada, se pusieron a gritar. La cuna que reserve para Rai no era habida. Yo histérica!.
6. Carlos tiene estatus para que lo subieran a business, pero como nuestros pasajes están unidos a los de nuestros hijos, NUNCA, pero NUNCA! te vana mandar a business, así que la suertuda fue la Marisol. Ella me dio su ticket y yo con cara dura dije ¨soy María Soledad Medina¨, el sobrecargo me miro con Rai en los brazos y me dijo " con un bebe no puede pasar". Yo muy tranquila le dije " oye! a mi no me interés irme en business, solo que me des la cuna que reserve", el muy complicado me dijo que no tenia cuna para Rai, así que yo lo mire diciéndole "de aquí no me muevo¨. Cuento corto, Rai y yo viajamos con un asiento cada uno en business. ja!
7. Carlos, Marisol y Carlitos apretados como sardinas. Yo como toda mama, me sentía culpable! (la Pilar Sorbo explica bien este tema en su libro), no pegue pestaña pensando en mi marido y Carlitos atrás, ni podía ir seguido ya que Rai dormía.
8. Por fin llegamos! con cuatro horas de atraso. La familia esperaba ansiosa, nosotros también. No dábamos mas. Cansados como perros y con un viaje agotador. Ahora acostumbrar a los niños al cambio de hora.
9. Solo el cariño a mi familia y mi país me hacen pasar por todo este estres, no hay valor!, miro para atrás y no se como lo hicimos todo. Pero vale la pena ver la cara de mi papa con una sonrisa de oreja a oreja. Priceless!

No cuento mas detalle, porque aparte de aburridos, son mas agotadores...jaja!