Desde que llegamos a vivir a Irlanda tratamos de ir todos los domingo a misa, algo que cumplimos religiosamente por casi tres anos. Cuando nació Carlitos pensamos que era mejor esperar que creciera un poco, ahí quede embarazada del Rai y se repitió el cuento. Hace un par de semanas encontramos la misa ideal, especialmente dedicada a los niños, con mucho espacio y con la tranquilidad que no solo mis hijos corren por todos lados.
Carlitos va fascinado ya que hay una Pila Bautismal inmensa, piensa que es una fuente de agua y pasa casi toda la misa mojándose las manos. Raimundo disfruta gatear por todos lados, es su mayor expresión de libertad y cada vez se mueve con mayor rapidez.
Es muy divertido ver a los papas corriendo de allá para acá, con un training envidiable para agarrar a sus niños. Al final de la misa se les entrega a los niños una hoja con juegos alusivos a la iglesia para que hagan en la casa. Es muy linda!.
Específicamente ayer los niños trajeron una planta que fue bendecida, así se dio inicio a la temporada de primavera.
Estoy muy feliz de que mis hijos participen de la misa, es un lindo momento de unión familiar que no hay que desaprovechar, siento que ahora se espera el domingo.
Mi mama cumpliria anos ayer 13, así que me acorde mucho de ella.
Mis ninos en misa
Las plantas esperando ser bendecidas
La Iglesia "Santa Teresa" muy cerca de nuestra casa
Mis tesoros
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